Perú - La infame 'carretera de la muerte' dividirá a pueblos indígenas aislados

1 diciembre 2016

Un hombre murunahua recientemente contactado. Si los planes de la carretera siguen adelante, muchos más pueblos indígenas aislados de la Frontera amazónica de los no contactados se enfrentarán a la catástrofe del primer contacto. © David Hill/Survival

Esta página se creó en 2016 y puede contener terminología en desuso.

Una nueva “carretera de la muerte” promovida por un polémico cura italiano dividirá en dos la tierra de varios pueblos indígenas aislados en el corazón de la Frontera amazónica de los no contactados.

Está previsto que el Congreso peruano apruebe pronto la carretera, que atravesará 270 km de una de las regiones más biodiversas y frágiles de la Amazonia.

Desde hace años el proyecto cuenta con el respaldo del padre Miguel Piovesan, un cura católico que ha descrito a los pueblos indígenas de la región como “prehistóricos” y que ha arremetido contra ONG internacionales por manifestar sus inquietudes sobre el plan.

En 2012 el Congreso peruano rechazó la carretera. Sin embargo, su construcción ha proseguido de forma ilegal durante muchos años y ahora el proyecto ha vuelto a ser propuesto por el congresista Carlos Tubino, del partido político Fuerza Popular.

El padre Miguel Piovesan, principal promotor de la carretera, junto al expresidente peruano Ollanta Humala. © Anon

Los pueblos indígenas aislados son los más vulnerables del planeta. Se estima que hay alrededor de 15 tribus no contactadas en Perú, muchas de las cuales se encuentran en la región donde se construiría la carretera.

Survival International ha interpuesto una queja ante Naciones Unidas citando el catastrófico impacto que esta tendrá sobre los indígenas aislados e instando a que el Gobierno peruano vete el plan.

Alrededor del 80% de los entre 3.000 y 4.000 habitantes de la zona son indígenas. La mayoría se oponen a la carretera.

Emilio Montes, presidente de la organización indígena FECONAPU, que está establecida en Puerto Esperanza, declaró: “Sobre la carretera no aceptamos ese tipo de proyectos; los rechazamos tajantemente. Por los motivos: a los indígenas no benefician, sino más bien a los madereros, mineros y petroleros ilegales y también a los narcotráficos. Atenta contra la vida de nuestros hermanos aislados, como los mashco-piros. [Suponen la] depredación de nuestros recursos naturales como flora y fauna. Más bien que nos respeten nuestro territorio ancestral (…) para nuestro futuro de nuestros hijos. Necesitamos otro tipo de desarrollo con manejo sostenible de nuestros recursos. Para así vivir con vida plena, también para nuestro futuro”.

El director de Survival International, Stephen Corry, declaró: “Si la carretera sale adelante destruirá a los pueblos indígenas aislados y su ‘desarrollo’ terminará para siempre. Survival lleva décadas luchando contra carreteras en esta parte de la Amazonia. ¿A quién se supone que deben ayudar? Si Perú tiene algún respeto por los derechos humanos fundamentales y por el cumplimiento de la ley, debe poner fin a estos planes enseguida”.

Indígenas aislados mashco-piros en 2011. Son una de las muchas tribus que podrían sufrir los impactos de la carretera. © Jean-Paul Van Belle

Información de contexto
- La vía conectaría Puerto Esperanza con la carretera interoceánica que atraviesa Perú y Brasil. El tramo que recorrería se encuentra en parte de la Frontera Amazónica de los no contactados, una región que se ubica a lo largo del borde peruano-brasileño y que cuenta con la mayor concentración de pueblos indígenas aislados del mundo.
- Pueblos indígenas aislados como los mashco-piros, los chitonahuas, los mastanahuas o los sapanawas podrían ser aniquilados si se construye la carretera. Todos ellos han vivido de forma nómada en la región durante generaciones. En los últimos años, foráneos como misioneros y madereros han forzado el contacto con varios grupos.
- En otros lugares de la Amazonia, los proyectos de “desarrollo” consistentes en la apertura de carreteras han permitido el acceso de un flujo de colonos a áreas remotas, y amenazan las vidas y las tierras de los pueblos indígenas aislados.
- Varias organizaciones indígenas en Perú han rechazado la carretera por medio de un comunicado.
- El padre Piovesan ha negado repetidas veces la existencia de los pueblos indígenas no contactados. Su boletín parroquial ha declarado: “No aceptamos la idea del AISLAMIENTO como un deseo natural de ellos. No lo comprobamos. Son entelequias de quienes sólo conocen a los pueblos indígenas de visita o por investigaciones basadas en hipótesis que nunca se comprueban en el campo”.
- Los indígenas aislados han expresado claramente su deseo de permanecer sin contactar. El proyecto no puede llevarse acabo sin su consentimiento y violaría su derecho a decidir su propio futuro.

La Frontera amazónica de los no contactados es el hogar de la mayor concentración de pueblos indígenas aislados del mundo. © Survival International

Sabemos muy poco de los indígenas aislados. Pero sí sabemos que son más de un centenar en todo el mundo. Y sabemos que poblaciones enteras están siendo exterminadas por la violencia ejercida por los foráneos que les arrebatan sus tierras y recursos, y por enfermedades como la gripe y el sarampión frente a las que no tienen inmunidad.

Los indígenas aislados no son atrasados ni reliquias primitivas de un pasado remoto. Son nuestros contemporáneos y representan una parte esencial de la diversidad humana. Donde sus derechos se respetan, continúan prosperando.

Todos los pueblos indígenas aislados se enfrentan a una catástrofe a menos que su tierra sea protegida. Estamos haciendo todo lo que podemos para garantizar dicha protección y para que tengan la oportunidad de decidir su propio futuro.

Indígenas no contactados de Perú
Pueblo indígena

Compartir