Organizaciones indígenas de Venezuela expresan su "profundo dolor" veinte años después de Haximú
21 agosto 2013
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La Coordinadora de Organizaciones Indígenas del Estado Amazonas de Venezuela (COIAM) y la organización de los yanomamis venezolanos Horonami han difundido una declaración con motivo del 20º aniversario de la masacre de 16 indígenas yanomamis, en la comunidad de Haximú, cercana a la frontera con Brasil.
La declaración expresa el “profundo dolor” por la muerte de sus familiares yanomamis en 1993 a manos de buscadores de oro brasileños, y advierte del creciente número de mineros ilegales que siguen operando en su tierra, lo que provoca el contagio de enfermedades y el aumento de las posibilidades de que se produzca un nuevo conflicto.
Las organizaciones describen la presencia de campamentos de mineros en áreas remotas del territorio yanomami, los cuales conllevan desastrosas consecuencias para las comunidades al exponerlas a enfermedades y violencia, al contaminar sus ríos con mercurio y ocasionar otros problemas sociales y medioambientales.
Aseguran que Horonami ha alertado a las autoridades sobre la presencia de buscadores de oro ilegales en su tierra y demandan que se adopten medidas urgentes para prevenir las invasiones. Sin embargo, de momento no se ha tomado ninguna medida.
Asimismo, la declaración también afirma que la presunta masacre que, según se informó, habría ocurrido en septiembre de 2012 en la comunidad de Irothateri, aunque sigue sin confirmarse, hizo emerger las evidencias de que hay buscadores de oro trabajando en la zona.
Las organizaciones exigen que el Gobierno venezolano cumpla el acuerdo binacional firmado poco después de Haximú, en presencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos: Brasil y Venezuela acordaron implementar un plan conjunto de protección permanente para monitorear y controlar la entrada de mineros ilegales en territorio yanomami.
Lee el comunicado completo en español.