El presidente Jair Bolsonaro ha “declarado la guerra” a los pueblos indígenas de Brasil.
Bolsonaro ha:
- intentado sacar el departamento gubernamental de asuntos indígenas, FUNAI, del Ministerio de Justicia para situarlo bajo el control de la ministra Damares Alves, predicadora evangélica que está siendo investigada por incitar al odio racial contra los pueblos indígenas
- intentado retirar la responsabilidad de la demarcación de los territorios indígenas de la FUNAI para encomendársela al Ministerio de Agricultura, dirigido por políticos antindígenas del lobby del agronegocio
- adoptado decretos para dificultar la protección de los territorios indígenas y el “seguimiento” de los aliados de los pueblos indígenas
- envalentonado a través de su retórica racista a los invasores a robar tierras indígenas y a atacar comunidades…
- y más…
Estas iniciativas anuncian una catástrofe para los pueblos indígenas en todo el país. El robo de tierras, la violencia y las enfermedades que propagan los foráneos, incluido el coronavirus, podrían acarrear la extinción de docenas de tribus no contactadas.
Por todo el país, los territorios indígenas están siendo invadidos y las selvas están siendo quemadas a un ritmo sin precedentes.
Sin embargo, los pueblos indígenas del país están llevando a cabo una contraofensiva. No permitirán que nadie les robe sus tierras, pues sin ellas no pueden sobrevivir.
Piden que les apoyes, por esto te pedimos que firmes y compartas.